Un ataque de Ransonware en España cada 6 minutos (IT Digital Security)
IT Digital Security habla con David López, Director de Operaciones y Preventa de Factum sobre el crecimiento de ataques de Ransomware en la primera mitad del año.

Factum ha identificado al ransomware como una de las amenazas cibernéticas más significativas para las organizaciones en 2025. Este tipo de ataque ya representa el 25% del total de incidentes registrados en lo que va de año. La situación en España es especialmente preocupante: se estima que cada seis minutos una empresa sufre un ataque de este tipo, lo que subraya la urgencia de contar con una estrategia sólida de ciberresiliencia.
En el ámbito nacional, el sector sanitario encabeza la lista de los más golpeados, seguido del industrial y el financiero. La razón: el alto valor de la información que gestionan y su necesidad de operar sin interrupciones, lo que los convierte en blancos prioritarios.
La inteligencia artificial (IA) está cambiando las reglas del juego para ambos bandos. Los cibercriminales ya están utilizando modelos generativos para automatizar la creación de malware, perfeccionar técnicas de phishing y detectar vulnerabilidades con una rapidez sin precedentes. Esto les permite diseñar ataques de ransomware cada vez más sofisticados, dirigidos y difíciles de identificar.
Sin embargo, la IA también se está convirtiendo en una aliada clave para los equipos de ciberseguridad, ayudando a detectar comportamientos anómalos, automatizar la respuesta a incidentes y reforzar la prevención proactiva. Como explica David López, director de Operaciones y Preventa en Factum: “La clave está en quién actúa con mayor rapidez: el atacante que aprovecha la IA o la organización que la emplea para anticiparse y reducir el impacto.”
Ciberataques más frecuentes y más sofisticados
Las previsiones para la segunda mitad de 2025 no son alentadoras. El recrudecimiento de los conflictos geopolíticos, la proliferación del ransomware-as-a-service (RaaS) y el avance de la IA generativa anticipan un escenario aún más agresivo y automatizado. Se espera una evolución hacia ataques más selectivos, silenciosos y con demandas de rescate cada vez más elevadas.
En un contexto donde evitar el ransomware resulta casi imposible, la prioridad debe ser reducir sus consecuencias. Desde Factum, se recomienda a las organizaciones adoptar una estrategia de ciberresiliencia basada en cinco pilares fundamentales:
- Copias de seguridad frecuentes, segmentadas y verificadas.
- Soluciones de detección y respuesta avanzadas para endpoints (EDR/XDR).
- Evaluaciones periódicas de vulnerabilidades y pruebas de penetración.
- Formación continua para empleados en buenas prácticas digitales.
- Planes de respuesta a incidentes, bien definidos y debidamente testeados.
Como concluye David López: “La mejor defensa ante el ransomware no consiste en esperar a ser atacado, sino en asumir que ocurrirá y estar preparado para reaccionar con rapidez y eficacia antes de que sea demasiado tarde.”